Amado mío,
He notado
los ciclos en mi vida, una y otra vez como se dan los ciclos de cambios
continuos que finalmente nos llevan a nuestra verdadera esencia.
Ciclos que
van y vienen permitiendo que aflore nuestro niño interior, ese niño que baila, ese niño que juega, ese
niño que nada a donde la corriente lo lleva. Ese niño que es feliz de forma
inalterable, ese niño que todos tenemos y que solamente da amor.
Y en medio
de tantos ciclos y tantos cambios, observo como las vueltas de la vida me
llevan a ti. Las vueltas me llevan a la unión de nuestros corazones permitiendo
que estos dos niños puedan jugar una vez más.
Siendo
felices juntos o separados, alegrando nuestras vidas con las melodías del
corazón. Melodías que vibran en intensas energía permitiendo que contemplemos
el sol con otra disposición.
Melodía que
nos une como el viento y las olas, haciendo de esta vida un maravilloso lugar
donde podemos pasear una vez más.
Y con esta
unión en medio de tantos cambios, nuestros niños juegan una vez más.
Te amo!
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